The road of trials

Luis Gerardo Martínez González

De la segunda parte del libro Adventures of an IT leader hay varios aspectos que me gustaría resaltar. El primero de ellos gira entorno a la importancia de crear un correcto plan de tecnología, es decir, se debe crear una estrategia tecnológica que permita tanto invertir en el mantenimiento de los sistemas de una empresa como estar preparados para invertir en nueva tecnología o renovar la existente. Este punto es de suma importancia, debido a que si no existe un análisis a largo plazo, puede resultar contraproducente invertir en el mantenimiento de los sistemas sino se cuenta con el presupuesto necesario para renovar.

Además, si se tiene en cuenta que el ritmo de la tecnología es altamente vertiginoso, sería absurdo no contar con un presupuesto para renovaciones, lo cual tendría consecuencias fatales para una compañía que tratara de competir con otras que están en un proceso de renovación de sistemas, tales consecuencias podrían desembarcar en la quiebra de la empresa. Una posible solución a los altos costos de mantenimiento, y que además permitiría destinar cierto presupuesto a renovación tecnológica es optar por sistemas open source, que como he mencionado en otras ocasiones cuenta con grandes ventajas.

Otro punto a destacar de la lectura, es relacionado con la implementación de nueva tecnología, la lectura menciona que en caso de que una empresa invierta en cierta tecnología, la ventaja competitiva esperada no pueda alcanzarse, debido a que sus competidores, al menos los que estén en disposición de realizar una inversión similar, pueden optar por adquirir el mismo avance tecnológico, razón por la cual la inversión ya no sería tan llamativa. Sin embargo, respecto a este punto considero que a pesar de estar latente la posibilidad de que otras empresas copien la tecnología, no deben las empresas cerrarse a no invertir, sino al contrario tratar de siempre estar a la vanguardia en lo que a tecnología se refiere.

Finalmente, hay que señalar que los resultados de la implementación de una u otra tecnología no siempre pueden garantizarse al cien por ciento, debido a que tanto la tecnología, como la sociedad en que nos desempeñamos son altamente fluctuantes.